Para entender la anatomía del aparato reproductor de los distintos grupos de mamíferos, y de las notables diferencias existentes entre ellos, hay que saber que el desarrollo embrionario tiene lugar independientemente en ambas mitades corporales, siendo una el espejo de la otra, y que éste tiene lugar además, estrechamente relacionado con el del aparato urinario. Salvo los monotremas que son ovíparos, todos los mamíferos son vivíparos y la fecundación es siempre interna, lo que requiere que el macho inserte el pene eréctil en el interior de la vagina de la hembra a través de la abertura externa conocida como vulva. Anatomía del tracto genital
Aparato reproductor femeninoLos órganos que conforman el aparato reproductor de la hembra son comunes a todas las especies, aunque existen diferencias significativas entre los distintos taxones. El ovario es la glándula sexual femenina, en la que se producen los óvulos o células sexuales femeninas. Una vez que éstos han madurado son expulsados del ovario hacia las trompas de Falopio u oviductos, que son los conductos por los que el óvulo llega al útero. El útero es una víscera sacular de naturaleza glandular. Realmente, en la mayoría de las especies se trata de dos cámaras separadas o cuernos uterinos, aunque el grado de diferenciación de ambos varía entre las especies hasta fusionarse completamente formando un útero simple, si bien esta condición sólo aparece en los primates no prosimios (lémures, lorises y tarseros), armadillos, perezosos y algunas especies de murciélagos. En todos los placentados existe algún grado de fusión de los cuernos uterinos que, en marsupiales permanecen completamente separados. El útero conecta con la vagina, única en monotremas y placentados y doble en marsupiales, que se abre al exterior a través de la vulva. Junto a ésta, un pequeño músculo denominado clítoris es común en todas las especies, y en algunas de ellas está dotado de un pequeño hueso. En los monotremas la abertura del tracto urogenital, al igual que ocurre en reptiles y aves, es común a la digestiva, dando lugar a un único orificio conocido como cloaca. En el resto de las especies, la abertura urogenital es independiente de la intestinal, existiendo una distancia entre ambas que varía entre especies. Lo mismo ocurre con el sinus urogenital que es el espacio existente entre la vulva y la abertura de la uretra en el tracto genital. La elefanta presenta el más espectacular sinus, que llega a medir hasta 60 cm. En contraposición, los primates no lo presentan abriéndose al exterior de forma independiente la uretra y la vagina. Aparato reproductor masculinoEn los machos, el aparato reproductor consta de dos testículos que en un primer momento son intrabdominales, y a lo largo del desarrollo, van descendiendo hasta una bolsa extrabdominal de piel llamada escroto, excepto en elefantes, cetáceos y desdentados que permanecen dentro de la cavidad abdominal. El pene, presenta morfologías distintas, conduce la orina y el esperma a través de la uretra, y en algunas especies de roedores, carnívoros y primates está dotado de un hueso (el báculo). En los marsupiales, es doble guardando el necesario paralelismo con la vagina de la hembra. La próstata es común a todas las especies, aunque en algunas existen además otras glándulas accesorias. Biología de la reproducciónUn componente fundamental de la evolución, del comportamiento, y de la historia de los mamíferos está basado en la dedicación que las hembras ponen en el cuidado de su descendencia, comenzando ésta incluso antes de que los huevos se fertilicen. Todas las hembras experimentan una cierta forma de ciclo estral en la cual los huevos deben prepararse y estar listos para una potencial fertilización. Las hormonas regulan cambios en varios aspectos de la fisiología femenina a través del ciclo y preparan a la hembra para la fertilización, la gestación y la lactancia. En este variopinto grupo animal, pueden observarse muchas estrategias reproductivas, y los patrones que vamos a ver a continuación son los extremos de una serie continua que abarca esta variación. Los factores ambientales, así como los requerimientos fisiológicos y sociales contribuyen al patrón de la reproducción encontrado en cualquier población o especie. Las diferencias en estos factores entre especies han conducido a la diversidad de los rasgos entre mamíferos y sus formas de vida. Apareamiento y comportamiento socialLas relaciones entre individuos de ambos sexos con fines reproductivos conocen varias situaciones en las especies mamíferas:
Desarrollo embrionarioHay tres grupos importantes de mamíferos, cada uno de los cuales está representado por una característica importante del desarrollo embrionario:
Los marsupiales (Metatheria) dan a luz a los jóvenes después de un período muy corto de la gestación (8 a 43 días) con un ínfimo grado de desarrollo. Permanecen por tanto estrechamente unidos a la madre hasta completar su desarrollo, y los periodos de lactancia son proporcionalmente muy superiores a los de los placentarios.
Una vez que han nacido, todos los mamíferos dependen de sus madres para alimentarse, pues sólo ellas pueden proporcionarles su primer alimento: la leche.
La reproducción estacional y los mecanismos de gestación no inmediata a la cópula son estrategias reproductivas que ayudan a mamíferos a coordinar el nacimiento de la descendencia para que ésta tenga lugar en los momentos en los que puedan aumentar las ocasiones de su supervivencia.
En el folículo ovárico se forma el óvulo que a medida que va creciendo y madurando migra hasta el exterior del ovario para recorrer el tracto reproductivo de la hembra hasta el lugar donde se produce la fecundación o unión del óvulo con el espermatozoide que puede ser en la vagina o el útero dependiendo de la especie. Una vez formado el huevo o cigoto, comienza la reproducción celular, diferenciándose las tres capas que describen a los amniotas: corion, amnios y alantoides, que irán también evolucionando a medida que se reproducen sus células, especializándose en determinadas funciones que darán lugar al desarrollo del nuevo individuo. Prolificidad y cuidado de las descendenciaAlgunos mamíferos dan a luz muchas crías escasamente desarrolladas en cada estación reproductiva. A pesar de este estado relativamente subdesarrollado, los jóvenes tienden a alcanzar la madurez relativamente pronto, pudiendo reproducirse sin haber alcanzado el tamaño o el aspecto de individuos maduros. Normalmente esto va relacionado con altos índices de mortalidad y baja esperanza de vida como ocurre con los roedores o los antiguos insectívoros. En el otro extremo del espectro de la historia de la vida, otras especies dan a luz un escaso número de individuos en cada parto. Estas especies tienden a vivir en ambientes estables donde la competición por los recursos es el único obstáculo para la supervivencia y el éxito reproductivo. La estrategia de estas especies es invertir energía y algunos recursos en conseguir descendientes altamente desarrollados que consigan ser buenos competidores. Los cetáceos, los primates y los artiodáctilos son ejemplos de las órdenes que siguen este patrón general.
La lactancia puede suponer un desgaste energético para la madre superior al de la gestación, pero la leche es imprescindible para que las crías, una vez fuera del útero materno puedan mantener su temperatura corporal, y crezcan y se desarrollen adecuadamente. Pero no sólo tienen que alimentarlas, las hembras tienen que proteger a sus crías de los depredadores, y éstas a su vez tienen que aprender de sus madres los mecanismos que les permitirán seguir con vida, por lo que en muchas especies, la descendencia permanece con la madre después de la lactancia durante un cierto periodo de tiempo.
En otras ocasiones, el macho participa en la protección de la descendencia de forma indirecta, dedicándose a la protección del territorio que ocupa la manada o la preservación de los recursos alimenticios. No obstante, en ciertos casos, el comportamiento de los machos en relación a este asunto, varía en función de las condiciones ambientales, responsables directas de la disponibilidad alimenticia. Independientemente del tipo de apareamiento, algunas especies como titíes o leones africanos, comparten el cuidado de la descendencia de todas las hembras del grupo. La mayoría de los mamíferos hacen uso una guarida o una jerarquía social para la protección de sus jóvenes. Otros, sin embargo, nacen bien desarrollados y pueden valerse por sí mismos relativamente poco tiempo después del nacimiento. Los más notables de este respeto son los artiodáctilos tales como ñúes o jirafas. Los jóvenes cetáceos deben también ser capaces de nadar por sí mismos poco después del nacimiento. perla camina como que se acaba de bajar de un caballo y esta rosada todo el tiempo y edson se hace el amor solo con la barbye de su hermanita hasta que un dia se le atoro y dijo que se sento en la barbie por accidente ñ. y se aman atte una persona cercana Exactamente igual que asistimos a grandes diferencias en cuanto a tamaño, forma o comportamiento de las distintas especies, también la esperanza de vida de estos animales varía enormemente de unas especies a otras. Por norma general, puede asegurarse que cuanta menos envergadura tiene un mamífero, menor es su esperanza de vida. Sin embargo, los murciélagos constituyen la excepción que confirma esta regla, pues aun siendo relativamente pequeños, pueden vivir en condiciones naturales incluso más de dos décadas, lo que es bastante más tiempo que el que viven muchas especies de mayor tamaño. Como norma general, los animales en cautividad suelen vivir más tiempo que los salvajes, algo que resulta evidente teniendo en cuenta que sus condiciones de vida están controladas para que les resulten favorables. La esperanza de vida de los mamíferos salvajes se extiende desde un año o algo menos hasta aproximadamente 70-80, si bien, algunas especies pueden sobrepasar esta edad; el mamífero más longevo que se conoce es la ballena de Groenlandia (Balaena mysticetus) puede llegar a vivir más de 200 años. Se considera que la edad máxima que puede alcanzar un humano es de 120 años. Véase también
Bibliografía
Enlaces externos
Categoría: Anatomía y fisiología de los mamíferos |
||
Este articulo se basa en el articulo Reproducción_de_los_mamíferos publicado en la enciclopedia libre de Wikipedia. El contenido está disponible bajo los términos de la Licencia de GNU Free Documentation License. Véase también en Wikipedia para obtener una lista de autores. |