BASF, SABIC y Linde celebran la puesta en marcha del primer horno de craqueo a vapor de calentamiento eléctrico a gran escala del mundo
Tecnología con potencial para reducir las emisiones de CO2 al menos un 90% en comparación con los craqueadores de vapor convencionales
Los craqueadores a vapor desempeñan un papel fundamental en la producción de productos químicos básicos y requieren una cantidad significativa de energía para descomponer los hidrocarburos en olefinas y aromáticos. Normalmente, la reacción se lleva a cabo en hornos a temperaturas de unos 850 grados Celsius. Hasta ahora, estas temperaturas se alcanzaban utilizando combustibles convencionales. La planta de demostración pretende demostrar que la producción continua de olefinas es posible utilizando electricidad como fuente de calor. Al utilizar electricidad procedente de fuentes renovables, la nueva tecnología tiene el potencial de reducir las emisiones deCO2 de uno de los procesos de producción más intensivos en energía de la industria química en al menos un 90% en comparación con las tecnologías utilizadas habitualmente en la actualidad.
La planta de demostración, que produce olefinas como etileno, propileno y posiblemente también olefinas superiores a partir de materias primas de hidrocarburos saturados, está totalmente integrada en los craqueadores de vapor existentes en Ludwigshafen. La próxima operación tiene como objetivo recopilar datos y experiencias sobre el comportamiento de los materiales y los procesos en condiciones de funcionamiento comercial para el desarrollo final de esta tecnología innovadora hasta su madurez en el mercado industrial. En dos hornos de demostración distintos se probarán dos conceptos de calentamiento diferentes. Mientras que en un horno, el calentamiento directo aplica una corriente eléctrica directamente a las bobinas de craqueo, en el segundo horno, el calentamiento indirecto utiliza el calor radiativo de elementos calefactores colocados alrededor de las bobinas. Los dos hornos de calentamiento eléctrico procesan conjuntamente unas 4 toneladas de hidrocarburos por hora y consumen 6 megavatios de energía renovable.
Para apoyar el desarrollo de la novedosa tecnología de hornos, el proyecto recibió 14,8 millones de euros del Ministerio Federal de Economía y Acción por el Clima de Alemania en el marco de su programa de financiación "Descarbonización de la industria". El programa apoya a las industrias de gran consumo energético de Alemania en sus esfuerzos por alcanzar la neutralidad en carbono.
"Con el desarrollo de los hornos eléctricos de craqueo al vapor, estamos poniendo en nuestras manos una tecnología clave que ayudará a reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero en la industria química. Me llena de orgullo y alegría haber logrado este éxito junto con nuestros socios SABIC y Linde. La planta de demostración aquí en Ludwigshafen nos proporcionará una valiosa experiencia en el paso final hacia la aplicación industrial de esta tecnología", declaró el Dr. Martin Brudermüller, Presidente del Consejo de Administración de BASF SE.
Abdulrahman Al-Fageeh, Consejero Delegado de SABIC ha declarado: "La tecnología del e-furnace encierra un enorme potencial para la sostenibilidad de la industria petroquímica mundial. Puede demostrar el papel que la electricidad renovable puede desempeñar en un proceso químico de mayor eficiencia y bajas emisiones. Gracias a una estrecha colaboración, al trabajo en equipo, al desarrollo de la propiedad intelectual y al avance de las mejores soluciones técnicas de forma holística, los equipos de SABIC, BASF y Linde han llevado este proyecto a esta fase clave. Estamos orgullosos de estar hoy aquí juntos para celebrar el poder de la acción colectiva en nuestro viaje hacia una economía circular del carbono."
"Es nuestro objetivo común demostrar que es posible electrificar la industria petroquímica y operar un craqueador a vapor con electricidad generada de forma sostenible. Este destacado proyecto conjunto es una prueba significativa de cómo juntos podemos desarrollar tecnologías pioneras que nos harán avanzar en el camino hacia las emisiones netas deCO2 cero y la industria climáticamente neutra", dijo Jürgen Nowicki, CEO de Linde Engineering.
"La tecnología STARBRIDGE™ acerca un paso más la visión de una industria petroquímica libre de emisiones".
Basada en el conocimiento combinado y la propiedad intelectual de las tres partes que colaboran en el desarrollo de las nuevas tecnologías, la unidad de demostración de Ludwigshafen será operada por BASF. Linde ha sido responsable de la ingeniería, aprovisionamiento y construcción de la planta. En el futuro, Linde comercializará las tecnologías desarrolladas bajo la nueva marca STARBRIDGE™, permitiendo a la industria petroquímica descarbonizarse mediante la sustitución de las tecnologías de combustión convencionales.
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