El CSIC retransmite la primera inyección de partículas en el acelerador LHC
Durante nueve horas se podrá visualizar la actividad de la sala de control del CERN, además de entrevistas y reportajes sobre el gran acelerador
Durante un total de nueve horas, la retransmisión ofrecerá imágenes de la puesta en marcha del mayor y más complejo instrumento científico jamás realizado: un anillo de 27 kilómetros de circunferencia, construido a una profundidad que oscila entre los 50 y los 150 metros en la frontera francosuiza, en el que un intenso haz de protones será acelerado a velocidades cercanas a la luz y guiado por los potentes imanes superconductores del LHC.
A través de conexiones con la sala de control del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN), los usuarios podrán ser testigos de este gran acontecimiento científico y tecnológico, además de visualizar reportajes y entrevistas a ingenieros y científicos implicados en el LHC.
Este importante evento supone la culminación de más de 20 años de intenso trabajo e implicación internacional en el que ha participado personal procedente de hasta 80 países distintos, como es el caso de numerosos grupos españoles de diferentes universidades y centros de investigación.
El CSIC no ha sido ajeno a este magno proyecto y ha contado con una participación a través del Instituto de Física Corpuscular. con sede en Valencia, y el Instituto de Física de Cantabria , ubicado en Santander, centros mixtos del CSIC y la Universitat de València y la Universidad de Cantabria, respectivamente. Estos institutos de investigación han desempañado una importante labor en el desarrollo y construcción de partes esenciales de dos de los cuatro grandes detectores que se han ubicado en cuatro puntos del anillo del LHC, con el fin de registrar los detalles de las colisiones de los dos haces de protones, que viajarán en direcciones opuestas y que se harán chocar frontalmente, cuando se complete la puesta a punto de la máquina dentro de unos meses. Se trata de asegurar que cualquier nuevo proceso físico o cualquier nueva partícula producida en el LHC sea detectada y sus propiedades medidas.
En concreto, en el IFIC ha contribuido al desarrollo del detector ATLAS. En este centro se ha construido una fracción significativa de los sub-detectores TiCal (calorímetro hadrónico) y el SCT (detector de trazas de silicio), en el que también ha participado el Instituto de Microelectrónica de Barcelona del CSIC (IMB-CNM)(comprobad si es solo del CSIC porque la web de ese centro está fatal y no queda claro).
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