Un tratamiento del cáncer de próstata aparece vinculado con una tasa más alta de cáncer de colón, según un estudio
Los investigadores recomiendan un uso apropiado de la terapia de privación de andrógeno
Los hombres con cáncer de próstata que reciben una terapia que trabaja con hormonas encaran un riesgo del 30 al 40 por ciento más alto de tener cáncer colorrectal, según un nuevo estudio.
El estudio observó el uso de la terapia de privación de andrógeno, un tipo común de tratamiento del cáncer de próstata que involucra el bloqueo de la hormona masculina testosterona mediante la remoción quirúrgica de los testículos o con inyecciones regulares. Este tratamiento ha demostrado sus beneficios para los hombres con cáncer avanzado, pero es menos claro cuál sea su beneficio para los pacientes en los cuales la enfermedad está menos avanzada. Aún así más de medio millón de hombres en Estados Unidos reciben esta terapia.
Los investigadores analizaron los datos de 107.859 hombres mayores de 67 años de edad con cáncer de próstata, identificados en la base de datos vinculados de Observación, Epidemiología y Resultados Finales y medicare, que proporciona información acerca de los adultos mayores con cáncer recién diagnosticado. Los resultados del estudio se publican en Internet en la revista Journal of the National Cancer Institute.
El estudio es el primero que ha vinculado la terapia de privación de andrógeno para el cáncer de próstata con un aumento en el riesgo de cáncer colorrectal. Los investigadores determinaron que el riesgo es más alto entre los hombres que recibieron la terapia de privación de andrógeno por el período más prolongado. Los pacientes a quienes se les removió los testículos, un procedimiento llamado orquiectomía, fueron los que mostraron los riesgos más altos de cáncer colorrectal.
En términos generales el riesgo de cáncer colorrectal siguió siendo bajo —menos del uno por ciento por año entre los pacientes que han tenido orquiectomía. Pero debería considerarse cualquier riesgo que se incrementa cuando se usa la terapia de privación de andrógeno en los casos donde el beneficio no es claro, señalaron los investigadores.
“La terapia de privación de andrógeno sigue siendo usándose en situaciones en las cuales no hay estudios sustentados en pruebas que muestren su beneficio. Cuando se sabe claramente que la terapia de privación de andrógeno será beneficiosa no debería haber dudas en usarla. Pero cuando no hay pruebas sólidas, esto se transforma en otro posible daño”, dijo el autor principal del estudio Vahakn S. Shahinian, profesor asistente de medicina interna en la Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan y miembro del Centro Integral del Cáncer de la UM.
Shahinian enfatiza que la terapia de privación de andrógeno puede ser el tratamiento que salve la vida a ciertos hombres con cáncer de próstata y que estos pacientes no deberían dudar en usarla. Los autores del estudio indican que el cuidado preventivo rutinario, incluido el examen para detectar el cáncer colorrectal, es importante durante el tratamiento del cáncer de próstata.
Estadísticas del cáncer de próstata: Este año unos 217.730 hombres en Estados Unidos tendrán un diagnóstico de cáncer de próstata y unos 32.050 morirán por esa enfermedad, según la Sociedad Estadounidense del Cáncer.
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