Concluida la búsqueda del elemento 113

01.10.2012 - Japón

El dato más inequívoco hasta la fecha sobre el esquivo elemento atómico 113 ha sido obtenido por los investigadores del RIKEN Nishina Center for Accelerator-based Science (RNC). Una cadena de seis descomposiciones alfa consecutivas, producidas en experimentos de la RIKEN Radioisotope Beam Factory (RIBF), identifica concluyentemente el elemento por medio de conexiones a nucleidos de descomposición bien conocidos. El revolucionario resultado posiciona a Japón para reclamar los derechos de nombre para el elemento.

La investigación de elementos superpesados, que no se obtienen de forma natural y deben ser producidos a través de experimentos, es un proceso esmerado. Desde que se descubrió el primero en 1940, los países han competido por sintetizar más de dichos elementos. Los americanos descubrieron los elementos 93 a 103, los rusos y americanos descubrieron los elementos 104 a 106, los alemanes descubrieron los elementos 107 a 112, y los rusos y los americanos juntos descubrieron los elementos 114 y 116.

El investigador Kosuke Morita y su equipo de RNC han hecho de Japón el primer país asiático en nombrar un elemento atómico. Durante años Morita ha investigado el elemento empleando un separador de iones de retroceso de gas a medida (GARIS) acoplado a un detector de semiconductores sensible a la posición para identificar los productos de la reacción. El 12 de agosto, sus experimentos dieron su fruto: los iones de zinc colisionaron con una fina capa de bismuto para producir un ion muy pesado seguido de una cadena de seis descomposiciones alfa consecutivas identificado como productos de un isótopo del elemento 113.

Mientras que el equipo de Morita también detectó el elemento 113 en experimentos realizados en 2004 y 2005, los primeros resultados identificaron solo cuatro eventos de descomposición tras la fisión espontánea de dubnio-262 (elemento 105). El isótopo dubnio-262 es conocido por descomponer vía descomposición alfa, pero esto no fue observado, y los derechos de nombrar no fueron concedidos puesto que el producto final no eran nucleidos bien conocidos en ese momento. La cadena detectada esta vez toma la ruta alfa alternativa, con datos indicando que el dubnio descompuso en laurencio y finalmente en mendelevio. La descomposición de dubnio-262 a laurencio-258 es bien conocida y proporciona una prueba inequívoca de que el elemento 113 es el origen de la cadena.

Combinado con sus resultados iniciales, el descubrimiento revolucionario del equipo promete afianzar su solicitud de derechos para nombrar el elemento. "Durante 9 años, hemos estado investigando para tener datos que identificaran concluyentemente el elemento 113, y ahora que al final lo tenemos, sentimos que nos hemos quitado un gran peso de nuestra espalda," dijo Morita. "Me gustaría dar las gracias a todos los investigadores y personal involucrado, que han sido perseverantes creyendo que un día, 113 sería nuestro. Ahora buscamos el elemento 119 y posteriores."

Publicación original

Más noticias del departamento ciencias

Noticias más leídas

Más noticias de nuestros otros portales